martes, 7 de junio de 2011

Prestar atención no implica ser consciente de ello.



Prestar atención a algo y ser consciente de eso mismo parece que son términos equivalentes: ambas acciones implican de alguna manera saber que el evento/objeto está ahí. Sin embargo un nuevo estudio realizado por un equipo encabezado por Jang Hsieh (MIT, EE.UU.), cuyos resultados ha difundido la Association of Psychological Science norteamericana y que aparecerán publicado en Psychological Science, pone de manifiesto que atención y consciencia son dos cosas distintas: tu cerebro puede prestar atención a algo sin que tú seas consciente de ello.

Los investigadores se propusieron comprobar si un objeto puede atraer tu atención aunque no seas conscientes de verlo en absoluto. Para averiguarlo diseñaron dos experimentos muy sencillos e ingeniosos: uno pasivo y el otro activo.

En el primero se usa un fenómeno llamado efecto “pop-out”, ese por el cual lo que es distinto visualmente destaca (“pops-out”). A cada uno de los participantes en el estudio se le colocó un dispositivo que hacía que cada ojo viese una parte de pantalla diferente. A un ojo se le proyectaban imágenes llenas de colorido de patrones cambiantes, lo que hace que toda la consciencia vaya a ese ojo, porque esa es la forma en la que trabaja el cerebro. Al otro ojo se les mostraban patrones estáticos de figuras de un solo color. La mayoría de éstos era verde, pero uno era rojo. Cuando los sujetos fueron examinados posteriormente para comprobar a qué parte de la pantalla había ido su atención, los investigadores encontraron que la atención se había desviado hacia el patrón rojo, aunque no tenían ni idea de que lo hubiesen visto.

En el segundo experimento todo era igual salvo el hecho de que los sujetos tenían que realizar una tarea difícil con los datos de los patrones cambiantes. El patrón rojo ya no atrajo la atención inconsciente. Se deduce de este hecho de que es necesario algo de la capacidad mental disponible para prestar atención a algo, incluso si no somos conscientes de ello.

Los investigadores sugieren que esta característica podría haber evolucionado como un mecanismo de supervivencia. Podría haber sido útil a los humanos primitivos para ser capaces de darse cuenta y procesar algo inusual en la sabana sin ser siquiera conscientes de ello.

Nota: Para entender la imagen mírala desde lejos.

Referencia:

Hsieh, P.-J., Colas, J.T., and Kanwisher, N. (2011). Unconscious pop-out: attentional capture by unseen feature singletons only when top-down attention is available. Psychological Science : In Press

2 comentarios:

Tito Eliatron dijo...

¿Se supone que al mirarla de lejos el tigre que aparece se difumina en favor de los pocos clores no-pardos que se ven (amarillos y verdes)?

Carlos OC dijo...

Guepardo o leopardo. Me inclino por el primero.

¿Se supone que es dificil detectarlo?